Hay cosas en las que puedes invertir dinero al viajar, pero que no quieres jamás utilizarlas. Es el caso de un seguro de viaje: es mejor tenerlo y jamás utilizarlo. Pero creanme que en cualquier viaje, nada será peor que nos suceda algo, y no contar con una cobertura adecuada.
En mis viajes debo confesar que incluso he llegado a abusar de la suerte en ocasiones. Esto, o porque he empezado un itinerario que pensaba breve y lo termino estirando por caminos impensados, o porque simplemente en mis comienzos, era un viajero de bajísimo presupuesto y de viajes breves.
Con el tiempo mis viajes se fueron estirando, y los riesgos también, y así empezaba a entrar en dudas con cada itinerario a la hora de contratar un seguro de viaje. Si eres de esos que viajan muchas veces dosificadas a lo largo del año, seguro te saldrá mucho más a cuenta contratar un seguro de viaje anual.
¿Como es un seguro de viaje anual?
En estos tipos de seguros, la cobertura cubre los 365 días desde la fecha en que eliges contratarlo, y abarca desde los gastos médicos, hasta otros inconvenientes, ciertos tipos de cancelaciones, pérdida de equipaje. Según las empresas y la modalidad, existen diferentes tipos de coberturas anuales con variantes, por ejemplo en las garantías en caso de anulación, o incluso hasta el tipo de viaje. Esto mismo puede suceder si contratamos seguros de viaje de menos duración: pueden ser especiales si viajamos en crucero, o si hacemos un viaje de estudio.
Supongamos la situación en la que hacemos un viaje importante al año, además de varias escapadas, es probable que el seguro de viaje anual también nos sea conveniente (me refiero a nuestro bolsillo). Solo es cuestión de hacer cuentas y ver cuales números son más convenientes: si una cobertura anual o temporal con fechas específicas.
¿Es imprescindible contratar un seguro de viaje?
Hay muchos países que directamente requieren a los visitantes un comprobante de cobertura de viaje al momento de hacer los trámites para ingresar. Esto normalmente es una reglamentación que no siempre nos van a pedir o controlar de un modo riguroso, pero de cualquier modo sí es importante contar con él. Sin ir más lejos, si viajamos por ejemplo de un país externo a la Unión Europea y hacia un país de la UE, nos exigirán contar con un seguro de viaje.
A la inversa, si somos residentes en la Unión Europea, seguramente con la tarjeta sanitaria europea estaremos bastante a cubierto si viajamos a países comprendidos por esta tarjeta. Sin embargo si viajamos a otros países por fuera de esta cobertura, necesitaremos pensar seriamente en contratar un seguro de viaje.
Y aún más allá de las obligaciones legales al momento de viajar, el seguro de viaje es una tranquilidad a nivel personal que para mí es altamente recomendable. Doy un paso más allá, y en esto lo tengo clarísimo: pensar en contratar el seguro de viaje más que una opción es una inversión en tranquilidad y no dudo en hacerlo.
Mi experiencia con seguros de viaje
Afortunadamente puedo decir que nunca tuve que utilizar el seguro de viaje por tener algún percance grave, pero no es cuestión de llamar a la suerte en el camino, sino estar tranquilo (de que al contratarlo siempre estaremos a cubierto). Yo actualmente estoy utilizando la cobertura por un año con la opción Totaltravel annual con InterMundial (*). Este seguro cubre todos los viajes dentro de esos 365 días del año en cualquier lugar del mundo sin excepciones (en viajes frecuentes de hasta 60 días). Por ejemplo, así estoy a cubierto con gastos médicos de hasta 2.500.000 euros, incluyendo repatriación y transporte sanitario.
Lo dicho, mi experiencia es limitada en cuanto al uso del seguro, ya que afortunadamente no tuve que utilizarlo (y espero que así siga siendo en mis viajes). Pero siendo un viajero frecuente, contratar un seguro de viaje anual saldrá a cuenta: no solo por lo que uno puede ahorrar con esta modalidad, sino también por la comodidad de organizar nuestros viajes sin preocuparnos por contratar un seguro en cada uno de ellos.
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