En mi viaje por la región de Lunigiana (el norte menos visitado de la región de Toscana), estoy dando con una buena cantidad de sorpresas que como siempre, voy subiendo día a día en mi Instagram.
Entre esas sorpresas, está el pueblo termal de Equi Terme (que puede parecer una maqueta al pie de montañas). Debo insistir con la idea de que esta región es una joya para quienes buscan pueblos apartados en paisajes de montaña, con cascos medievales y castillos en cantidad, con el aliciente de ser una zona donde no llega el turismo de masas (incluso por momentos me siento un extraño espécimen viajero por aquí). Pero imágenes como esta que sigue confirma que visitar esta región es un acierto:
Imagen (*) Matías Callone
Fosdinovo es un ejemplo de pueblo medieval asombroso. Está situado sobre una colina que le hace de muralla, pero de entre las calles e iglesias sobresale una construcción aún más imponente: el castillo de Malaspina. Es tan imponente que domina las vistas de todo el valle y en un día de buena visibilidad se puede apreciar parte de la costa de la Provincia de la Spezia.
De hecho si visitas Liguria, y Cinque Terre, mi recomendación es escaparse hacia la región histórica de Lunigiana y el castillo en Fosdinovo, que está a un paso. La ubicación de este borgo italiano era absolutamente estratégica y hoy es fácil notarlo.
Mientras que en la primer foto puedes ver el mar y la costa de Liguria, en la foto que sigue, se puede ver la vista hacia el ingterior, con las montañas nevadas asomando como paisaje de fondo: son los Alpes Apuanos que hacen de marco majestuoso para el norte de Toscana. También se puede apreciar la disposición del borgo extendido sobre una colina y al fondo el castillo:
Caminar las estrechas calles del pueblo te lleva por un sendero entre casas coloridas y mucha tranquilidad:
Nuevamente en este vista se aprecia la costa de Liguria en el horizonte:
Las iglesias y el castillo con las construcciones que sobresalen por encima de las casas de tejados:
Fosdinovo tuvo su época dorada entre los siglos XIV y XVIII, cuando su peso político y económico lo llevaron a ser la capital de un importante marquesado de la rama de los Malaspina. Y tanto el castillo como el pueblo quedaron al margen de cualquier destrucción entre tantas turbulencias en la península itálica, lo que garantiza que conocer este punto de Lunigiana suponga un viaje imaginario en el tiempo.
El castillo de Malaspina.
Es por sus dimensiones uno de los complejos fortificados más grandes de Toscana. Por su ubicación estratégica fue crucial para controlar el paso de las zonas costeras hacia el valle de Lunigiana y el noroeste de la actual Italia. El principal impulso a ese poderío fue dado por el Marques de Malaspina a fines del siglo XIII, ya que se convierte en sede episcopal de la región. El castillo fue ampliado y restaurado hacia finales del siglo XIV, pero también en siglos siguientes como fortaleza y residencia de los Malaspina. Se pueden visitar los interiores y admirar las habitaciones, una sala en donde según la tradición estuvo alojado el escritor Dante, los patios, las mazmorras y objetos de colección y valor histórico.
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Para finalizar, el mapa con la ubicación de Fosdinovo y el Castello de Malaspina:
(*) Imágenes pertenecen a Matías Callone bajo licencia Creative Commons
Hermoso. Y muy bien relatado.
Felicidades, vivir viajando ha de ser un sueño hecho realidad.
Muchas gracias!! Un saludo