Creo que no hay mejor resumen de lo que una se encuentra al visitar Siena: un casco antiguo que por sus dimensiones y conservación impacta a todo aquel que lo visite. Esta ciudad de Toscana es una auténtica maravilla no solo de Italia, sino de toda Europa.
(*) Imágenes Matías Callones
Por lo tanto, si estabas dudando si visitar o no esta ciudad, creo que no hay mucho más que agregar para disipar dudas: Siena está reconocida como ciudad Patrimonio de la Humanidad. Por lo tanto si estás pensando en hacer una ruta por Toscana, te anticipamos un paseo visual por esta ciudad.
Para empezar, la ciudad desde las colinas toscanas se ve con estas vistas, pero poco imaginamos lo que espera adentro:
Caminar las calles de Siena dentro de las murallas es encontrarse con un paisaje urbano medieval congelado por varios siglos (con evidentes señales de que el turismo es una de las principales actividades):
El corazón de la ciudad es la Piazza del Campo, nada menos que una de las plazas medievales más grandes y de las más bonitas en Europa:
Pero toda la ciudad de Siena es una colección de joyas arquitectónicas, palacios, iglesias, y es que esta ciudad supo rivalizar con Florencia en cuanto a lo económico, pero también en cuanto a diagramación urbana varios siglos hacia atrás:
En cualquier hora, la Piazza del campo es preciosa para visitarse y caminar por ella:
Pero en todas direcciones, las calles de Siena son puro encanto con sus desniveles y tejados:
En Siena siempre asoman torres imponentes entre las calles:
Y pasear por las calles es precisamente la oportunidad para descubrir rincones especiales, observar su gente y el movimiento de cada día:
Todo tiene un aire medieval, pero también típicamente italiano:
Viaja seguro y con descuento para nuestros lectores
>> cotiza tu seguro de viaje IATI con 5% de descuento desde aquí
Una auténtica postal:
Cuando nos acercamos a las murallas y miramos hacia afuera de la ciudad, el paisaje se vuelve un cuadro de colinas bajo esa mística niebla toscana:
Y al volver a caminar hacia el interior de Siena, las calles se vuelven un pequeño laberinto:
Un laberinto que simula un viaje a otros tiempos:
Datos curiosos y cosas que ver en Siena:
– Siena rivalizó con Florencia en muchos aspectos en la Edad Media, entre ellos en el arte. Por ello la ciudad es una colección de tesoros arquitectónicos, pinturas y esculturas que se pueden encontrar por todos los rincones. Desde hace siglos es un centro cultural de varias disciplinas humanísticas.
– Esta rivalidad llega a su fin en el año 1555 con el fin de la República de Siena. Desde entonces se somete al dominio de Florencia. Por entrar en un período de letargo y decadencia la ciudad se conserva casi sin cambios hasta hoy. De hecho el aspecto actual de la ciudad es muy parecido al de los siglos XIII y XIV: visitar esta ciudad es como recorrer un museo medieval a cielo abierto.
– La catedral de Siena es uno de sus edificios más notables, un ejemplo del gótico italiano. En su interior hay obras de Donatello, Ghiberti, Jacobo della Quercia y otros escultores notables, así como la famosa Madonna del pintor Duccio di Buoninsegna (del siglo XIII).
– La Piazza del Campo tiene una forma de abanico (casi de anfiteatro), y en torno a esta plaza se ubican algunos de los edificios más notables de Siena, como el Palazzo Pubblico, o el Ayuntamiento con su Campanile y su museo de arte en su interior. Esta plaza es el lugar donde se realiza el famoso Palio de Siena, la carrera de caballos en el que se enfrentan simbólicamente los distintos distritos de la ciudad. Se realiza el 2 de julio y el 16 de agosto (es una de las fiestas históricas más importantes de Italia).
– Siena posee una buena colección de palacios notables, entre ellos el Palacio Salimbeni (uno de los bancos más antiguos en funcionamiento continuo), el Palacio Chigi, el Palacio Piccolomini (una muestra de arte renacentista senés), el Palacio Buonsignori (la Pinacoteca Nacional), o la Fortezza Medicea (una fortaleza de los Médicis).
Para finalizar, tal vez podría interesarte ver la Guía para organizar un viaje a Toscana.
(*) Imágenes Matías Callone bajo licencia Creative Commons
