Entre los sitios que pude visitar haciendo la ruta en coche por la Costa Oeste de Estados Unidos, estaba uno de los que fue mis visitas favoritas del recorrido: Bryce Canyon.
Aunque el nombre hace referencia a un cañón, este paisaje tan particular no es propiamente un cañón, sino un anfiteatro natural gigantesco en donde se despliega una de las colecciones de chimeneas de hadas más espectacular que puedas ver en todo el planeta.
Las chimeneas de hadas (o también conocidas como hoodoos), son columnas sedimentarias formadas por el efecto de la erosión de la lluvia, el hielo y el viento sobre rocas débiles en zonas desérticas. Estas columnas se encuentran por miles en Bryce Canyon, un paisaje en permanente transformación donde se produce un increíble despliegue de colores del rojo al naranja con vistas más que espectaculares.
Pero en este post no me voy a concentrar tanto en el paisaje tan espectacular ni en las vistas, sino en una curiosidad que se produce en el parque: los árboles «araña». En un lugar semi-desértico donde el suelo se va «desmoronando» y desintegrando a cámara lenta por efecto de la erosión, no hay nada más difícil que sobrevivir como un árbol.
A medida que haces el recorrido por el parque de Bryce Canyon irás notando como hay cantidad de árboles que van quedando con sus raíces desnudas. Incluso árboles que sobreviven sus últimos años con apenas una raíz conectada al suelo, y el resto en el aire.
La impresión al ver estos árboles de Bryce Canyon es que parecieran estar a punto de «salir caminando», con sus raíces como si fueran las patas de una araña. Simplemente quería compartir esta curiosidad, la de estos árboles que luchan por seguir conectados a una tierra que se les desvanece:
Al caminar por algunos de los senderos de Bryce Canyon, como el Navajo Trail, puedes ver cantidad de árboles que luchan no solo contra la erosión del suelo, sino también por la búsqueda de luz, alcanzando alturas asombrosas:
Tan solo quería compartir estas imágenes y la curiosidad de la lucha por la supervivencia de los árboles en un paisaje tan cambiante.
Bryce Canyon también se puede conocer si sales desde Las Vegas siguiendo esta ruta por el Lejano Oeste.
* Todas las imágenes pertenecen al autor del post, Matías Callone, y las puedes compartir bajo licencia Creative Commons (citando al autor y enlazando al post y al álbum original en Flickr)
