Las ruinas de un castillo sobre un gigantesco promontorio que mira al mar, otro castillo que parece sacado de un cuento, un pueblo colorido en una isla llena de vida salvaje, un pueblo entre bosques «mágicos», un conjunto de menhires prehistóricos. Lo que sigue es una selección de sitios curiosos en Escocia, que de tan curiosos, hasta parecen sitios de fantasía.
1. Las ruinas del castillo Dunnottar
El castillo Dunnottar es un sitio curioso y sorprendente por varias razones: es un castillo en ruinas sobre un precipicio rocoso en la costa nordeste de Escocia, un concurrido santuario de aves, y un paisaje de paredes abruptas de hasta 50 metros.
Se encuentra en la costa nordeste escocesa y es un sitio lleno de historias (especialmente de la Edad Media), un punto defensivo estratégico dominando las rutas del mar del norte de Escocia. Es un sitio visitado por miles de turistas cada año y que entre puestas de sol, la niebla o las nubes escocesas, preserva su aire y mítica de tiempos pasados.
2. La isla de Mull (y su belleza escénica)
La isla de Mull (una de las Hébridas) es una de las más grandes de Escocia, y una de las más bonitas por sus paisajes. Además, es un paraje que hace de tesoro natural por la variedad de especies que lo habitan. Es posible ver cantidad de aves, pero también ballenas, delfines, que suelen verse en excursiones turísticas.
3. El colorido pueblo de Tobermory
En la misma isla de Mull hay pueblos como Tobermory, uno de los más pintorescos de Escocia. Originalmente un pueblo de pescadores, sus casas coloridas en torno al pequeño pueblo y bahía son una de las postales de la isla.
4. Dunkeld (y sus bosques mágicos)
Por si fuera poco lo encantador que es el pueblo de Dunkeld, en la zona de Perthshire, está rodeado de bosques que parecen mágicos (especialmente en otoño). Especialmente los bosques del Hermitage a apenas una hora desde Edimburgo. El pueblo en particular, es un pequeño caserío de fachadas blancas lleno de historia con edificaciones históricas como la catedral, o la abadía.
5. Castillo Craigievar
Si hay un castillo que parece salido de un cuento de hadas en Escocia (y en Reino Unido), si duda el castillo de Craigievar es uno de ellos. Con su fachada rosada, entre colinas de los montes Grampianos, la silueta de paredes abruptas con sus torretas, gárgolas y ménsulas lo hace un sitio que se ve de fantasía.
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Vale la pena visitarlo por todo lo anterior, y por ser un exponente del estilo señorial escocés. Terminado en el año 1626, perteneció a una misma familia (Forbes) durante más de tres siglos hasta que fue donado al National Trust for Scotland a mediados del siglo XX. Se puede visitar en los meses de verano.
6. Las Piedras de Callanish
Es uno de los conjuntos de menhires prehistóricos más completos, situados en cercanías de la población de Callanish, en la costa oeste de la isla de Lewis (Hébridas Exteriores). Son 13 monolitos (algunos de hasta 5 metros de altura)flanqueados por una larga senda de acceso. La forma en que están dispuestas las rocas es similar a la de una cruz celta.
Continúa en Parte 2