Deyá es otro de los pueblos a incluir en cualquier lista tentativa que quiera desplegar los pueblos más bonitos y curiosos de España. Deyá nos traslada hasta las islas Baleares, y en particular, a la isla de Mallorca. La atracción de éste rincón está en su emplazamiento, en sus casas y estilo característico y en su historia: una colina, casas pintorescas, vistas al mar y a la montaña..
Para empezar está emplazado en las Sierras de Tramontana, paisajes rocosos que se encuentran con el mar Mediterráneo. Y en ese entorno el pueblo despliega una cantidad de fincas tradicionales de piedra que salpican una colina de un modo encantador. Y muy cerca está el mar, calas y promontorios de roca enormes que se adentran en el mar y se tiñen de naranja al atardecer:
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Deyá (o Deiá en su denominación en catalán) posee un ambiente bohemio gracias a su encanto y tranquilidad, capaz de atraer a escritores, artistas y gente en busca de inspiración y belleza. Lejos de ser una urbanización reciente, posee una larga historia que se remonta a los tiempos en que la presencia musulmana sentó las bases del poblado actual, hace unos ocho siglos.
Por si fuera poco, todo el entorno de Deyá merece recorrerse, incluyendo localidades aledañas como Valldemossa y Sóller, entre vistas panorámicas de sierra y mar.
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