Hay seres naturalmente adorables y, sin dudas, los pingüinos son uno de ellos. Entre elegantes y cómicos, nadie podría pasar cerca de un par de estas criaturas sin querer pararse a mirarlos un lindo rato. Imagínense, entonces, entrar en una isla que es hogar de cientos. Irresistible, ¿verdad?
Héctor García
Pues si eso es lo que quieres, entonces la isla Magdalena, en la Región de Magallanes y Antártica Chilena es donde tienes que ir.
Héctor García
El mismo Magallanes detectó en su primer viaje por el estrecho este punto de tierra en medio del mar y, sin dudarlo, entendió el valor que encerraba. Aún hoy, son 60.000 parejas las que llegan hasta aquí y merodean la costa, para empollar y hacer proliferar a su –por suerte- numerosa familia. La mayoría de estos pequeños y simpáticos seres son de la rama de los “magallánicos” y todos saben convivir muy bien con skúas, cormoranes, gaviota comunes y australes y también muchos lobos marinos.
La isla de los pingüinos ocupa 82 hectáreas a las que los viajeros sólo pueden llegar por mar, subiéndose en barcazas y adentrándose en las aguas. La excursión suele durar todo el día porque el viaje ida y vuelta es de varias horas cada uno.
Héctor García
Al ir acercándose a la isla, los recibirán los graznidos de sus habitantes, que pululan por toda la superficie pedregosa ocupándose de sus menesteres diarios. Los sorprenderá la gran comunidad que allí habita, y si los visitan entre octubre y marzo, podrán ver cómo anidan en pequeñas cavernas.
Por supuesto, sólo se puede ir con contratando tour con guía y siempre respetando los senderos marcados, para no desequilibrar el hábitat de los pingüinos. Como decíamos, además aquí se da la coincidencia de que convivan los animalitos de dos patas y los leones marinos, con lo cual el espectáculo natural es aún más increíble.
Así es como la Isla Magdalena, en medio del Estrecho de Magallanes, y en conjunto con el islote Marta, conforman una de las más importantes pingüineras del sur de Chile. Por toda la vida y la diversidad que hay aquí es que se lo ha decretado Monumento Natural Los Pingüinos. Gracias a este título, y muy acertadamente, todo aquí está vigilado y protegido: no se permite pescar en los alrededores y el ingreso debe hacerse respetando determinadas reglas que permitan que disfrutemos de este universo particular sin alterarlo.
Así que ya sabes, si estás de visita por Punta Arenas, una de las alternativas para curiosear y sorprenderte es llegar hasta la Isla. Apenas son 37 km los que separan del continente, aunque el trayecto pueda llevar más tiempo por hacerse por mar. Conocer el mundo de estas aves tan lindas bien vale la pena, ¿no creen?
Héctor García
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Hola me llamo Carmen . Estuve en Chile en el año 2000 recorriendo el país durante un mes,desde Atacama hasta Puerto Natales. Lo hice sola y,fue un viaje que marco mi vida,pues desde entonces me gusta viajar sola siempre que puedo.espero lo disfrutes,para mi Chile es el país geográficamente más bonito y completo del planeta . Seré tu fiel seguidora.